No dudes ni un momento en que tu progenitor será comodidades del hogar y que no deseáis estar las 24 horas del día de un lado para otro. Disfrutará gastando el dinero que sea necesario para conseguir cumplir todos tus caprichos, pero deberá recordar que lo importante es el cariño, y éste no se compra ni con todo el oro del mundo. Tu tendrás capaz de hacer cualquier cosa que tú le pidas. Sois dos personas que compartís el gusto por las muy claro que tu padre siempre va a estar ahí para ofrecerte su apoyo, la fuerza que necesitas, y la energía y seguridad que hace falta para enfrentarse a las vicisitudes de la vida. Tu madre estará encantada de que respetes todos aquellos valores que te intentó enseñar de pequeño y que le eches una manita de vez en cuando en el cuidado de su casa. Comprenderá a las mil maravillas cuándo estás pasando por uno de esos días en los que el mundo se te viene encima y te encuentras más sensible y abatido que de costumbre, pero no te preocupes porque ella estará ahí para escuchar tus penas y si es necesario ofrecerte su hombro para que eches una lagrimita.