Tú eres el hijo que todo padre Aries podría esperar tener, pues en ti puede ver cumplidas muchas de sus expectativas. Y es que tú eres extrovertido, orgulloso, luchas por ser el primero en todo, y si eres el centro de todas las miradas, mejor que mejor. Quizá no seas tan aventurero como tu padre y prefieras las cosas seguras, pero tienes unas cualidades muy parecidas a las suyas, y por eso él te quiere tanto. Ambos estáis a la última en todo tipo de cuestiones, adoráis las ideas nuevas y pensáis que la vida es para vivirla y disfrutar de ella. Además no siempre los hijos tienen que aprender de los padres, sino que tú al tuyo le vas a enseñar que de vez en cuando hay que dejar de pensar en uno mismo para ocuparse de los demás. Querrás a tu madre Aries por ser una persona con una actitud brillante y confiada, y ambos os admiraréis mutuamente por ser entusiastas y llenos de vida. Tu madre te agasajará con múltiples palabras de cariño y admiración para así conseguir evitar tus incisivas preguntas y tus críticas a cualquier cosa alocada que ella haga.